Se llama María Escalante, vino desde Cádiz y este martes “perdió toda la mañana” sin que nadie le atendiese por culpa del casting de la película
El amor de Andrea que se desarrolló en la Casa de la Juventud en San Fernando.
Cabe recordar que el director almeriense
Manuel Martín Cuenca prepara en Cádiz su próximo proyecto
El amor de Andrea desde hace meses. Pues bien, el equipo de casting buscaba ayer a
chicos (varones) de entre 12 y 16 años, mujeres de entre 25 y 55 años y hombres de 40 a 60 años en San Fernando. No era necesaria experiencia previa ni conocimientos interpretativo. El horario establecido para la prueba era de 09.30 horas a 13.00 horas.
Pues bien, para sorpresa de María, que llegó sobre las diez y media de la mañana, le dijeron en la misma puerta que “
el proceso estaba cerrado y que escogían a los 50 primeros en llegar”.
Su enfado fue
in crescendo cuando preguntó que “dónde ponía eso, no había visto en ninguna red social donde se anunciaba esa condición”, a la vez que pidió el libro de reclamaciones que, por supuesto, le dijeron que no tenían. Esta mujer gaditana se desplazó incluso hasta la Policía Local para denunciar lo ocurrido.
Luego, en un segundo intento, volvió a personarse en la
Casa de la Juventud para volver a pedir explicaciones y, según ella, en esta ocasión la recibió una persona de la productora. “Sus palabras textuales fueron esto es
como las rebajas, el primero que llega es el que compra la camisa más barata. Así es la vida”.
La situación de María Escalante, que se muestra indignada, la vivieron otras muchas personas que se quedaron esperando en la puerta sin que al final pudiesen acceder a hacer el casting.