Navantia ha informado de que la factoría de San Fernando (Cádiz) ha puesto a flote la duodécima y última lancha de desembarco LLC construida por la compañía para la Marina Australiana.
En una nota, Navantia detalla que el diseño de estas lanchas está basado en las construidas por la compañía para la Armada Española y entregadas entre los años 2006 y 2008.
El contrato, que fue firmado en diciembre de 2011, contemplaba la construcción íntegra en Navantia de las 12 unidades, lo que supuso una carga de trabajo para la Bahía de Cádiz estimada en unas 350.000 horas de trabajo.
Las lanchas están destinadas a operar con el LHD 'Canberra' y LHD 'Adelaide', buques de proyección estratégica similares al "Juan Carlos I", también construidos por Navantia. Se prevé que la entrega de las cuatro últimas lanchas se produzca en el verano de 2015.
Todas las lanchas se están entregando al cliente "cumpliendo los requerimientos de calidad, presupuesto en horas de fabricación y con una mejora de tres meses sobre el plazo de entrega contractual".
La maniobra de puesta a flote, que ha tenido lugar en la factoría isleña, ha consistido en la puesta a flote de la lancha con la ayuda de un pórtico. Con anterioridad se ha realizado el traslado de la misma mediante una plataforma autopropulsada, desde el taller donde ha sido construida hasta la zona de la dársena donde se han realizado diversas comprobaciones previas a la puesta a flote.
La lancha cuenta con una eslora total de 23,3 metros; 6,40 metros de manga de trazado y 2,8 metros de puntal de construcción. En cuanto a la propulsión, cuenta con dos motores diesel de 809 kW, que accionan dos propulsores de chorro de agua --'waterjets'-- a través de cajas reductoras.
Su velocidad en condición de lastre supera los 20 nudos y tiene una autonomía de 190 millas a plena carga. Sobre su capacidad de carga en diferentes condiciones, apunta que está preparada para el transporte de un carro de combate 'Abrams', varias combinaciones de vehículos de Ejército, una compañía de fusileros o un camión con contenedor de 20 pies.
Australia es para Navantia "un país estratégico en cuanto a la cantidad de programas navales en curso". Cuenta con una filial en el país, muestra de la apuesta por el mismo. Recientemente se han firmado varios contratos para la adaptación de los buques de Navantia a los requisitos de la Marina Australiana, lo que le posiciona como opción "sólida y sin riesgos".