San Fernando cuenta en esta temporada estival con playa canina por segundo año consecutivo, siendo así “referente” en la provincia gaditana en atención a las mascotas durante la temporada de verano.
Ya se han habilitado los paneles de señalización y elementos informativos en la playa de Camposoto, indicando los accesos, características y normativa de uso de esta superficie, de aproximadamente 5.000 metros cuadrados, ubicada a unos dos kilómetros desde el acceso número 8 (el último) a la playa.
Está previsto que este miércoles se complete la colocación de los últimos elementos, entre ellos los contenedores de residuos y el vallado que delimita 1.125 metros cuadrados en el que las mascotas sí pueden estar sueltas. En el resto de la playa canina etarán con correas y acompañados de sus responsables.
Camposoto acoge la única playa para mascotas en toda la provincia de Cádiz y una de las diez que permanecerán operativas este verano en Andalucía y que “cumplen con la exigente legislación existente en esta materia”.
El gobierno municipal ha indicado que “este servicio es una oportunidad para quienes disfrutan de los animales, dentro de las limitaciones que marcan las normativas medioambientales ajenas al Ayuntamiento y que estipulan las administraciones competentes”.
También San Fernando se convierte en “referente en la provincia de un tipo de turismo que cada vez está más presente entre los segmentos generadores de economía y desarrollo”, dicen desde el Gobierno municipal.
Para ello aportan un estudio realizado a nivel europeo en 2015 que ha revelado que uno de cada cuatro dueños de mascotas (25 por ciento) elige su destino vacacional en función de si éste permite o no alojar animales domésticos, frente al 32 por ciento de los españoles encuestados que afirman lo mismo, superando en seis puntos la media europea.
No explica el Ayuntamiento qué dice la encuesta sobre el porcentaje de personas que elige el lugar de sus vacaciones en función de que no haya playa canina. O de mascotas, que es un término en el que entra toda clase de animales comúnmente aceptados como de compañía. Ya cada uno haya sus cuentas sobre la rentabilidad de la "apuesta" turística.
El Bipartito mantiene que con esta iniciativa polémica desde el año pasado la playa y la ciudad se integran paulatinamente en los conceptos de Dog Friendly y Pet Friendly (conceptos que se aplican en ciudades en las que los animales son bienvenidos) “que hoy día conforman ciudades con una amplia oferta de servicios de cara al cuidado animal”.
En tales ciudades, además de habilitar los espacios naturales al uso de las mascotas, se facilitan las actuaciones encaminadas a la convivencia del ser humano con los animales de compañía en comercios, hoteles, restaurantes, etc... que, “se vienen ya adoptando por parte de empresarios y promotores de nuevos yacimientos económicos y turísticos de la ciudad”.
Normativa de uso
Desde el Consistorio se explica que la playa canina ya se encuentra delimitada, en la misma zona que el pasado año, por lo que puede ser utilizada por los propietarios con sus mascotas. Se trata de un espacio de escasa afluencia de bañistas, de ahí que se convierta en la zona que permite la legislación vigente.
Existe un decálogo de normas de uso de la playa que puede ser consultado en distintos paneles situados en el entorno de la playa isleña, especialmente en el acceso al sendero hacia la playa canina. Entre estas diez normas figura que la entrada de los perros a la playa canina debe hacerse en todo momento en compañía de sus dueños, con correa y exclusivamente a través del sendero peatonal que se dirige hacia la Punta del Boquerón.
No está permitido acceder a la zona de mascotas con ellas por la orilla o por otros lugares de la playa. Una vez llegados a la playa canina, las mascotas sólo podrán permanecer sin correa en la zona cuya valla se dispondrá a mediados de esta semana. En el resto de los 5.000 metros cuadrados de playa, deberán estar atados y podrán bañarse, pero también con correa y en compañía de sus responsables.
Mejoras paulatinas con actuación en el sendero
El gobierno municipal ha adelantado que el objetivo marcado es llevar a cabo paulatinas actuaciones que redundarán en beneficio de la playa canina, especialmente en el sendero de la Punta del Boquerón, gracias a la apuesta de la Junta de Andalucía y su colaboración en la intervención prevista.
“Cada año se irán haciendo palpables las mejoras para acceder a la playa canina, lo que vendrá a consolidar nuestra oferta para el turismo de mascotas, paralelamente a los cambios que ya se han venido produciendo en materia de accesibilidad general para las personas”.