La Junta Local de Seguridad, presidida por el concejal de Seguridad Ciudadana Ignacio Bermejo, se ha reunido en la mañana de hoy martes para activar el Plan de Autoprotección elaborado de cara a la Semana Santa de 2019. En esta reunión han estado presentes la concejala de Fiestas, Mar Suárez, el concejal de Infraestructuras, Antonio Rojas, los mandos de la Policía Local, Cuerpo Nacional de Policía, Protección Civil, y representantes del Consejo Local de Hermandades y Cofradías, con el objetivo de coordinar las acciones que, en materia de seguridad y atención a la ciudadanía, lleven a a cabo las fuerzas de seguridad.
El Plan de Autoprotección para la Semana Santa isleña de 2019, reflejado en un documento que supera las doscientas páginas, contempla una media diaria de 102 efectivos de los cuerpos policiales, Protección Civil y Bomberos que permanecerán en activo para garantizar la seguridad en la ciudad. Son en total 718 turnos los que realizarán durante los siete días de activación del plan –desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Resurrección- con un promedio diario de 42 agentes de Policía Local –alcanzando los 60 agentes el Jueves Santo, 22 funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía –siendo el Domingo de Resurrección el que más, con 27 efectivos-, 32 voluntarios de Protección Civil de media diaria –con el Domingo de Ramos como día con mayor número- y seis bomberos de guardia cada jornada de la Semana Mayor.
A este personal en cometidos de seguridad se unen una decena de vehículos de la Policía Local de media, seis del Cuerpo Nacional de Policía y, diariamente, las dos ambulancias de Protección Civil y los dos vehículos mixtos de los que disponen y los seis vehículos de Bomberos. La Semana Santa isleña de 2019 contará con 35 vías preferenciales de acceso y de evacuación para vehículos de emergencia reflejadas en la planimetría incluida en el Plan de Autoprotección.
En la reunión de la Junta Local de Seguridad también ha constado los resultados de atenciones de la Semana Santa pasada, si bien el plan redactado contempla un historial que se remonta al año 2000 en cuanto a las incidencias registradas durante los días de celebración de este evento. Los datos demuestran que la Semana Santa isleña es un evento seguro y con unos bajos índices de siniestralidad, según han podido constatar los cuerpos de seguridad. En este sentido, en 2018 se registraron únicamente 59 incidencias, divididas en cinco apartados establecidos cada año: niños perdidos (0), asistencias (41), traslados a domicilio (6), traslados a ambulatorio (6) y traslados hospitalarios (6). La mayoría de estas atenciones se deben a mareos, lipotimias, heridas o hipotensiones, sin que revistieran gravedad ninguna de ellas.
Previsión en ‘puntos calientes’
El Plan de Autoprotección coordinado en la Junta Local de Seguridad contempla una serie de puntos y momentos de la Semana Santa a los que se les presta especial atención por su importancia en cuantificación de personas. Entre ellos figura la madrugada del Viernes Santo con la salida procesional de la Hermandad del Nazareno, en la que se calcula que desde la Iglesia Mayor hasta el final de la Carrera Oficial, en la confluencia Real-Isaac Peral, se concentran unas 25.000 personas más otras cinco mil en torno al resto de calles y en el recorrido de la Hermandad de la Expiración, que es la que coincide durante unas horas en la calle con el Nazareno. La madrugada posee unas medidas de actuación concretas que afectan a los callejones laterales de la Iglesia Mayor, zonas concretas para ambulancias, la retirada de mesas y sillas que ocupan la vía pública en zona de seguridad o venta ambulante.
Otros ‘puntos calientes’ son el Domingo de Ramos a la salida de la cofradía de Cristo Rey, el Lunes Santo “a causa de la especial longitud de las procesiones, motivada porque van una detrás de otra, sin espacios intermedios”, o la noche del Martes Santo, en la que se estiman 10.000 personas en las calles Pece Casas, Bravo y Lope de Vega “colocándose la mayoría de ellas delante del paso de la Caridad”, circunstancia que mantiene en alerta a los cuerpos de seguridad durante el tiempo en el que esta hermandad desfila por las Siete Revueltas; una posible masificación del público a la altura del callejón Croquer con Murillo durante el paso de la cofradía del Huerto y la recogida de la Hermandad del Prendimiento en la zona de El Parque, “donde la singularidad de la recogida de los dos pasos en paralelo atrae una multitud de público que se concentra en un espacio reducido”.
Los restantes puntos a destacar en este sentido con el puente Jesús del Gran Poder el Miércoles Santo al paso de la hermandad de esta misma advocación y “medidas adicionales de seguridad” el Viernes Santo con el Santo Entierro, dada la presencia de autoridades civiles y militares en el cortejo.
Con el Plan de Autoprotección y la coordinación de la Junta Local de Seguridad, el Ayuntamiento aborda la identificación y evaluación de los riesgos, las acciones necesarias para la prevención y control de éstos así como las medidas de protección y otras actuaciones a adoptar en caso de emergencia.