La Plataforma Cultural 'Artería' de Sanlúcar nace de la mano del blog Dueloliterae y pretende promover no sólo la Literatura, las Artes y la Cultura en general, sino también otros movimientos, propuestas, que agiten la reflexión sobre el futuro de la ciudad de y de las localidades de su entorno.
De este modo, aparte de temas como Literatura y Crisis, se propondrán otros que versen sobre las posibilidades de la ciudad y de la comarca noroeste. Como ejemplos de este aspecto social se cita la utilización del espacio público en la ciudad y su relación con la juventud y sus demandas de ocio, o también las posibilidades reales de un turismo cultural, eficaz, motor de economía, en esta comarca. Y otros como la manipulación del pensamiento a través de una tecnología que sobrepasa y puede terminar dirigiendo la forma de pensar.
Se sabe perfectamente que en esta ciudad hay muchas personas que llevan años y años luchando por la Cultura, por lo Social, y con ellas se quiere colaborar para, si es posible, imaginar conjuntamente proyectos ilusionantes y eso, que saneen el aire.
Se está especialmente interesado en todo lo que tenga que ver con los jóvenes, con sus necesidades, sus deseos, se quiere saber qué es lo que echan en falta, qué se quieren para habitar felices en la ciudad. Por ello, además, si todo se consolida, de intentar organizar talleres para ellos, cine, escritura, medios de comunicación, tecnología y manipulación, se propone preguntarles directamente a ellos, a través de distintas vías, encuestas, entrevistas, etc.
En ese sentido, la segunda actividad que se ha proyectado, el espacio público en la ciudad y su relación con los jóvenes y sus demandas de ocio, de formación, desea contar con su voz.
La cultura, las Humanidades, no constituyen un mero adorno que decora nuestras rutinarias vidas. Constituyen, principalmente, la única herramienta posible de reacción social. Cuando esas vidas quedan uniformadas, simplificadas, la posiblidad de un pensamiento crítico desaparece por el hostil desagüe de la vulgaridad. Decía José Luis Sampedro que "para qué queríamos libertad de expresión, si no tenemos libertad de pensamiento".
La música, la pintura, el cine, la poesía, no son simples deleites, son armas para el cambio, calles soleadas en las que recuperar el lenguaje. Y en cuanto uno empieza a amar las palabras, no tardará mucho en denunciar a aquellos que día tras día las destrozan. No tardará mucho en apartarse de ellos, en constituirse como sujeto autónomo, capaz de pensar por sí mismo.
Ahí esta la cuestión: "otros están pensando por nosotros. Por eso es premeditado el fomento de la incultura, de lo vulgar, de lo rancio, de las frasecitas estúpidas que se presentan como ingeniosas, de la nada. Se trata de que la gente no piense. ¿Y por qué pretendemos intentar cambiar tantas inercias insanas?. Simplemente porque es posible. Nos sigue quedando la palabra, la obligación de, al menos, intentar defenderla".
La primera actividad de Artería tendrá que ver con eso, con la palabra, concretamente con las posibles, o inciertas, relaciones entre la Literatura y las distintas crisis sociales. En el acto intentarán defender la dignidad del lenguaje María Regla Prieto, Pablo Gutiérrez, José Pallarés y Luis Enrique Ibáñez. En breve, se anunciará día, lugar y hora, esperándose a ciudadanos que deseen compartir inquietudes, imaginar posibilidades de futuro.
Según alguna interpretación etimológica, la palabra arteria griega, ἀρτηρία, lo que significa en origen es "tubo de respiración", es decir, cualquier conducto por donde el aire asciende y permite el saneamiento del aire viciado de un habitáculo o reducto cerrado. La tilde pretende connotar la idea de un espacio en el que se expenden proyectos, ideas, palabras...