Alrededor de un centenar de ciudadanos vestidos de blanco reivindicaron la libertad a expresarse en el mismo lugar donde una semana antes se increpó a un vecino
El mismo escenario donde una semana antes, un grupo de vecinos de Sanlúcar impidieron que un ciudadano se manifestara pidiendo diálogo sobre Cataluña, se ha convertido siete días más tarde en lugar de reivindicación de la libertad de expresión.
Convocados por la Plataforma Agua Clara y con la participación de los concejales de Izquierda Unida y del colectivo Ecologistas en Acción de Sanlúcar, alrededor de un centenar de ciudadanos, vestidos de blanco, reivindicaron la libertad a expresarse. Los manifestantes portaron pancartas donde podía leerse "No a la intolerancia". Además, al término de la concentración, se leyeron poemas en torno a la misma temática.