El gol, en remate de cabeza tras un lanzamiento de falta lateral, vino a representar lo que había sido toda una primera mitad donde ambos equipos se midieron con cautela y precaución, mucho más de parte francesa, y donde apenas llegaron ocasiones de marcar, salvo en saques a balón parado.
La diferencia estuvo en que el Olympiacos no atinó los suyos, con Melberg (m.4) enviando fuera junto a la cepa de poste izquierdo y Stoltidis (m.30) viendo como el meta Carrasso desviaba el suyo. En cambio, el Girondins acertó el suyo con Ciani, justo en el momento que más duele al rival (m.92).