“Salgo del club porque era necesario”. Es la sentencia que ya se palpaba desde hace unos días y desde este miércoles ya es oficial. Manolo Gaspar y el Málaga CF separan sus caminos. En una rueda de prensa abarrotada, con el cuerpo técnico y la plantilla al completo, además del administrador judicial del Málaga, José María Muñoz, y más trabajadores del club, el paleño confirmó su adiós entre lágrimas de impotencia. “Me duele mucho las formas y yo sé que no las merezco”.
Manolo Gaspar ya tenía decidida su marcha cuando se destituye a Pablo Guede, en la jornada seis. “Hablé con José María. Mi decisión estaba tomada. No me fui porque la entidad me pide que por favor continúe, que confían en mi trabajo y que hiciera el siguiente mercado”. Su marcha se estiró hasta este día 1 de febrero, con el mercado invernal finiquitado con tres fichajes, dos salidas y una operación que termina en fiasco y que implicaba el regreso de Tete Morente, de lo que aclaró que el club “más no pudo hacer”.
Las críticas y la autocrítica
“He entendido la mayoría de las críticas, es parte del juego y de mi cargo. Quiero dar gracias a la afición, a todos los malaguistas de corazón, aunque sé que no es nuestro momento. Ha sido un honor y un privilegio poder representar al Málaga. Os aseguro que he tratado de ser el mejor director deportivo posible y os pido perdón por no haber estado a la altura".
“A la afición: en vuestras gargantas y en vuestras palmas está el camino. A mi familia: solo ellos saben lo que he pasado y cómo lo he sufrido.Tengo un hijo de cuatro años que no he visto, me he dedicado cien por cien a este club. Desearle fuerza y suerte a los que vengan. Cuando me recupere, volveré a La Rosaleda".
¿Compensaba seguir en el cargo durante este tiempo? “No compensa, pero soy leal. Me ha dolido todo y ahora no tengo ganas de venir al campo, hasta que mi hijo no me lo pida, lo veré por la tele. Me duele mucho las formas y yo sé que no las merezco”.
“Cuando es un momento de crisis, ser la imagen y la voz de esta institución quema mucho. Los resultados deportivos son mi responsabilidad, pero me ha quemado mucho. Estaba todo centrado en mi persona y deseo que ahora se calme el ambiente”.
“Solo nosotros sabemos lo que hemos pasado aquí. Hemos visto renacer al club, literalmente. Estaba ya quemado de la temporada pasada, las ganas se recuperaron este verano, pero los resultados acaban revertiéndolo todo”.
¿Por qué decidió continuar en el cargo tras la temporada pasada? “En ese momento tenía muchas ganas de pelear. Guede me transmitía una fuerza y una seguridad que me hizo soñar. Hicimos una planificación, la más trabajada que yo he podido ver, pensada al detalle, pero esto es fútbol y todo no se puede controlar”.
¿Autocrítica? “Cuando tienes que hacer una plantilla cada año, lo normal es que te equivoques. En los mercados no íbamos con fuerza. El año que viene, en Segunda, vamos a tener una base de jugadores. Los errores que son míos ya estáis ustedes para indicarlos. ¿Si vuelvo atrás, hubiera decidido otras cosas? Sí. Pero en el momento, estaba convencido de que iba a salir”.
Tres entrenadores
“La confianza en Pelli, pase lo que pase aquí, es al doscientos por cien. Aunque haya un descenso, a no ser que decida lo contrario el que venga”, decía así de tajante Gaspar, que le firmó un contrato a Sergio Pellicer para esta temporada que resta más la campaña siguiente.
Era pregunta obligada la precipitada salida de Pepe Mel, a lo que contestó: “Con Pablo tuvimos menos paciencia. Parecía que se iba a derrumbar la Rosaleda si no salía. Pepe Mel lo entendió, son los resultados, pero fueron los tiempos los que no fueron correctos. Pensamos que era lo mejor, pero sí, no fue el momento adecuado. Siempre es una putada cesar a un entrenador”.
Sobre la planificación y si fue Guede el que decidió algunos fichajes, contó: “Guede quería firmar solo argentinos y mexicanos porque controlaba ese mercado. Había jugadores que proponía, por perfiles.. y aquí no veo ningún mexicano. El trabajo, en el fútbol, es de un equipo. El entrenador tenía su opinión y el director deportivo la suya, y así es como se trabaja en el 95 por ciento de los clubes”.
Tras contestar todo en 50 minutos de extensa comparecencia, Gaspar se marchó con un mensaje de fe en lo que ocurra en el verde. “El Málaga se va a salvar cien por cien, no tengo ningún tipo de duda”.
