En un Ayuntamiento -que presumiblemente no es el único- donde la Oferta de Empleo Público se ha convertido en una rara avis que difícilmente sobrevuela la ciudad, las horas extraordinarias han sido motivo de debate durante años y lo que pueda estar ocurriendo en estos momentos en el caso concreto de la plantilla de la Policía Local, un problema anunciado desde el momento en que los políticos programaron un Bicentenario con un número de policías que ni por asomo se han sumado a una plantilla que no cumple la ratio ni de lejos.
Tanto con el PA como con el PP al frente de la delegación correspondiente, el problema ha estado en la madre de todos los problemas en un municipio con escasa recaudación. Y no hace falta hablar del robo de la Caja para justificar lo justificable, porque lo que no hay son recursos por los que entre el dinero que es lo peor que puede pasar para que el dinero entre. De ahí la necesidad de la mítica ayuda especial.