La mayoría de los pasajeros han sido trasladados al Aeropuerto de Lanzarote, desde donde regresarán a sus lugares de origen.
Rafael Márquez, uno de los pasajeros afectados, informó a Efe que embarcó en Málaga el pasado domingo y que desde el comienzo del viaje se detectaron problemas con la electricidad, así como ausencia de agua caliente, problemas de climatización y con las cisternas o de ventilación, lo que generó bastante nerviosismo entre el pasaje.
Explicó que la situación se agravó la pasada noche, cuando viajaban rumbo a Lanzarote, procedentes de Agadir “porque el barco estuvo parado en alta mar, al menos unos 25 minutos, y hubo problemas de malestar”.