En un esfuerzo por aliviar la carga fiscal de sus ciudadanos, el Ayuntamiento de La Algaba ha anunciado la congelación de los gravámenes en varios impuestos y tasas, una decisión que, según el consistorio, busca reducir la presión económica de los hogares y empresas de la localidad. Desde el 1 de enero de este año, se ha aplicado esta política de congelación, que afecta al Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), manteniendo sus cuotas sin incremento alguno para 2024.
Además, el Impuesto sobre el Incremento de los Terrenos de Naturaleza Urbana (IIVTNU), conocido comúnmente como “plusvalía”, incluye ahora nuevas bonificaciones para aquellos herederos que reciben una vivienda en herencia, dependiendo del valor catastral del bien.
En su comunicado, el Ayuntamiento destaca también el esfuerzo realizado para incentivar el uso de energías renovables. En el último año, centenares de viviendas se beneficiaron de una bonificación del 20% en el IBI por la instalación de paneles solares, una deducción que ahora no necesitará renovarse hasta dentro de cinco años. La reciente aprobación de una nueva Ordenanza Reguladora para la Instalación de Captación de Energía Solar proporciona mayor claridad sobre los procedimientos para quienes desean sumarse a la transición hacia energías limpias.
Asimismo, las tasas municipales también experimentan ajustes: además de congelarse en sus respectivas ordenanzas, se ha aprobado una reducción en la tarifa de la Ordenanza de Entrada a Vehículos a través de las aceras y en las reservas de vía pública para aparcamiento, cambios efectivos desde este año.
Desde el Ayuntamiento subrayan que, pese a la ubicación estratégica de La Algaba, el municipio mantiene una presión fiscal inferior a la media de la provincia. La facilidad de pago en dos plazos sigue vigente, una medida establecida años atrás para ayudar a las familias algabeñas a gestionar mejor sus finanzas.