La Fiscalía de Jaén ha pedido la libre absolución para Mohamed N., autor del presunto homicidio de A.E.Q., de 41 años de edad y vecino de Jaén, en los jardines del Hospital Médico-Quirúrgico de Jaén tras provocarle un fuerte impacto en la cabeza con una piedra en la madrugada del pasado 11 de marzo, toda vez que carece de "pruebas que incriminen" al procesado.
Según han manifestado a Europa Press fuentes judiciales, la Fiscalía ya pidió el sobreseimiento por no tener pruebas suficientes que culpabilizaran a Mohamed N. No obstante, se abrió juicio oral y ahora es la familia de la víctima mortal la que pide prisión para el acusado, pues, tal y como adelanta este jueves 'Diario Jaén', la misma pide 25 años de cárcel al considerar al acusado autor de un asesinato.
Asimismo, cabe recordar que ingresó en prisión como presunto autor del homicidio de A.E.Q. dos días más tarde de producirse los hechos. De este modo, según la investigación que llevaron a cabo agentes del Cuerpo Nacional de Policía adscritos a la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Brigada Provincial de Policía Judicial, el detenido entró en el Servicio de Urgencias del Hospital Médico Quirúrgico exigiendo ser asistido por el personal sanitario, no dudando en amenazarles e intimidarles, si bien, al parecer era conocido por el personal del centro médico.
Ante esta actitud, se personaron los servicios de seguridad, a quienes les manifestó que le acompañaran ya que había encontrado un cuerpo de un varón en los jardines y que podría estar aún con vida. Los vigilantes se encontraron con el cadáver de un hombre que yacía en el suelo en un gran charco de sangre junto a una piedra de grandes dimensiones, presentando varias heridas inciso contusas en la cabeza así como señales de haber recibido multitud de golpes.
La dotación policial de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana condujo a Mohamed N. hacia las dependencias policiales donde, en un primer momento, manifestó voluntariamente la misma versión que había dado a los vigilantes de seguridad. Así, una vez comprobada su identidad, su situación legal en España y alguna posible requisitoria judicial, los investigadores se centraron en la reconstrucción de las horas previas a la comisión del hecho delictivo.