El deporte del judo en Jaén tiene muchos nombres propios tanto en hombres como en mujeres. No obstante, aunque en los chicos siempre hay quien esté en todo lo alto del podio en distintas categorías y la cantera está dando sus frutos, no ocurre lo mismo en féminas, categoría en la que en los últimos años hay ‘sequía productiva’.
Podría recordar muchos nombres de los que a lo largo de los años han representado con orgullo y con éxito al judo jienense en muchas competiciones, pero en el día de hoy sólo nos podemos acordar de Paco Alcaide, un veterano deportista que, con la ilusión de un niño, trabaja día a día en pro de esta actividad deportiva en el gimnasio Athenas, donde junto al siempre presente Diego García, realiza una gran labor tanto en el aspecto competitivo como educativo con los más jóvenes, puesto que además de sus elevados conocimientos, Paco es de esas personas que tienen un excepcional comportamiento y una insuperable humanidad, aspecto que hacen que su corazón sea más grande que el mismo cuerpo que lo acoge.
Sus clases con los más pequeños son dignas de elogio por la forma de tratar y de inculcar las enseñanzas a los que acuden con la idea de practicar o introducirse en esta actividad. Alcaide, que lleva toda su vida vinculado al judo, deporte que junto a su familia forma parte de su vida.
Luego de un breve paréntesis en las competiciones, Alcaide volvió hace unos años representando a su club en los campeonatos de España, logrando excelentes clasificaciones. Pero el momento cumbre, le ha llegado esta pasado fin de semana acudiendo al mundial de judo para veteranos que se ha celebrado en Málaga.
Paco Alcaide que participó en la serie de M3 (-100 kilos), acudió con una buena preparación y puesta a punto, pero no tuvo suerte al cruzarse en su camino, Ruslan Seilkhanov, de Kazakhstan, que sería medalla de plata. Sin embargo, la experiencia para el judoca jienense ha sido excepcional, ya que ha representado a Jaén, Andalucía y España en todo un mundial al que han acudido más de 1.300 deportistas de todo el universo.
Paco Alcaide suma esta presencia a su larga trayectoria y las sensaciones que ha recibido y los momentos inolvidables que ha vivido los hará llegar a sus jóvenes alumnos, y todo quedará reflejado en trabajo diario sobre el tatami, junto a Diego García, y de ellas los principales beneficiados serán sus alumnos.
Enhorabuena, Paco. Tus lecciones magistrales, tu saber estar, comportamiento y constancia son aspectos dignos de todo elogio hacia tu persona y ante todos los que te rodean. Felicidades.
