El sindicato USTEA Cádiz Enseñanza ha denunciado una situación “muy grave” sufrida por un afiliado que padece un cáncer de médula ósea y al que el INSS (Instituto Nacional de la Seguridad Social, dependiente del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social) ha dado el alta obligatoria para incorporarse a su puesto de trabajo.
“A este docente se le diagnosticó en noviembre de 2017 Mieloma Múltiple, un cáncer de Médula Ósea de difícil curación. Ha estado de baja desde entonces. Fue operado del corazón, ha recibido quimioterapia y radioterapia y su oncohematólogo del Hospital Puerta del Mar le dijo al comienzo de la enfermedad que se olvidara de trabajar y que se centrara en su salud (dando por sentado que la enfermedad padecida lleva a la Incapacidad Total o, como sería lógico, Absoluta)”, apuntan desde USTEA.
Lo primero que intentaron desde el sindicato fue aclarar que no se tratara de un error administrativo; "tan increíble nos parecía que un trabajador con un cáncer fuera obligado a volver al trabajo sin estar curado". Por ello contactaron con la Delegada de Salud de Cádiz, Isabel Paredes -aunque el INSS pertenece al Ministerio y no a la Junta- para que les ayudara a confirmar con el INSS que no fuera un error o un sms que no debía ir dirigido al afiliado. "Hemos de darle las gracias a Isabel Paredes. Por muy distantes que ideológicamente nos encontremos, ha hecho lo posible para aclarar este tema y para poner el factor humano por delante de todo. Lástima que ese factor humano esté tan ausente en los despachos del INSS de Cádiz", indican.
El docente sigue en tratamiento pero “el jueves pasado este compañero recibe un sms en el que se le dice que va a recibir el alta obligatoria y que tiene que incorporarse al trabajo”. USTEA Cádiz presentó este miércoles un escrito por registro en Subdelegación del Gobierno para que el subdelegado tome acción en este asunto. “Nos parece aberrante que se pisotee de este modo el derecho de los trabajadores y seguiremos luchando para revertir esta injusticia”.
