La llegada de ómicron ha provocado tal explosión de contagios por coronavirus que en algo más de dos meses la sexta ola ha conseguido rebasar todas las olas anteriores, con casi 63.000 contagios a fecha del sábado, en espera de los del fin de semana que se ofrecen el lunes, superando a la que había registrado hasta la fecha más, la segunda (de mayo a diciembre de 2020), la más larga en el tiempo y que acumulaba 56.233 casos, aunque la incidencia en los hospitales está siendo muy inferior a la de periodos anteriores y su letalidad, aún mucho menor.
Con casi 400 pacientes ingresados en los hospitales sevillanos y medio millar en cuidados intensivos, con 92 fallecidos contabilizados en esta sexta ola, que comenzó oficialmente el 11 de octubre, a pesar de la creciente presión hospitalaria y asistencial, intensificada desde que comenzaran las fiestas navideñas, lo cierto es que de los 63.000 casos, sólo un 1,7% de ellos ha requerido hospitalización, frente al 4,2% de la quinta ola; el 7,57% de la cuarta; el 7,1% de la tercera; el 7,69% de la segunda y el altísimo 49,1% de la primera, en la que la falta de pruebas impide hacer una comparativa exhaustiva.
De esos contagios, en esta sexta ola sólo se han agravado para llegar a las UCIs el 0,11% de los contagiados, aunque se mantiene, como en la quinta ola, que esos enfermos críticos son el 6,6% de los ingresados, cuando en aquel periodo pasaron a estas unidades el 0,29% de los hospitalizados. En la cuarta ola, el porcentaje de contagiados que terminó en UCI fue del 0,84%, el 11,2% de hospitalizados; en la tercera, fue inferior y entró en UCI el 0,67% de los contagiados y el 9,39% de los hospitalizados; en la segunda el porcentaje fue del 0,73% de positivos y el 9,59% de ingresados; y en la primera, entraron el UCI el 6,25% de contagiados y el 12,7% de los que ingresaron en los hospitales sevillanos.
También se ha reducido la letalidad con respecto a olas anteriores. Con 63.000 casos, sólo el 1,01% de los contagiados ha fallecido, 92 personas, que suponen el 8,5% de los que han ingresado en los hospitales con coronavirus. En la quinta ola, con 271 víctimas, el porcentaje de fallecidos con respecto a los contagiados fue del 0,68%, el 15,13% de los hospitalizados, mientras que en la cuarta ola, con 203 víctimas, el porcentaje fue similar, con un 0,6%, pero inferior con respecto a los hospitalizados, con un 8%.
Los porcentajes sí que se elevan en la tercera ola, de diciembre de 2020 a marzo de 2021, cuando la vacunación sólo había alcanzado a los más mayores. Se contabilizaron 647 fallecidos, el 1,49% de los contagiados y el 21,24% de los que ingresaron en los hospitales, aunque más letal fue la segunda, con 919 decesos en la provincia de Sevilla, lo que supone el 1,63% de los casos de esa ola y el 21,24% de los ingresados. Caso aparte fue la primera ola: con 290 fallecidos, supusieron el 11,85% de los contagiados y el 24,1% de los enfermos que llegaron con coronavirus a los hospitales sevillanos.
Con una ligera tendencia a la baja pero que todavía deja casi 12.000 nuevos contagios contabilizados en la semana pasada, sin contar los de este sábado y domingo, la sexta ola en la provincia de Sevilla parece entrar en la meseta de la curva pero en la que aún no se atisban señales que indiquen que vaya a descender. Los contagios, aunque en su mayoría de carácter leve por las características de ómicron y la incidencia de la vacunación, que en la provincia de Sevilla alcanza el 88,5% de los mayores de 5 años con al menos una dosis, están tensionado no sólo la Atención Primaria y los centros de trabajo por las bajas masivas, sino también los hospitales.
En una semana, la provincia ha sumado 70 pacientes más ingresados en sus hospitales, mientras que alcanzar e incluso superar el medio centenar de pacientes críticos se está convirtiendo en una constante en las unidades de cuidados intensivos. A esto se une el incremento de víctimas mortales, con 37 sólo en esta semana de los 48 que han fallecido en enero, más de la mitad de los que se contabilizan en esta sexta ola que se iniciara en octubre, con 92 decesos en total. Es la ola que menos víctimas arrastra pero Sevilla ya contabiliza 2.422 desde que se iniciara la pandemia hace casi dos años, aunque en esta ocasión no es la provincia con mayor mortalidad, puesto que es Málaga la que en esta sexta ola más víctimas acumula, con 103, con 2.096 en total.
