Los trabajadores del Servicio Andaluz de Salud (SAS) de la provincia de Sevilla están convocados desde este lunes a participar en el proceso para dar un nuevo nombre al antiguo Hospital Militar de Sevilla, reabierto por la Junta de Andalucía tras su rehabilitación, después de 17 años de abandono.
Según ha explicado la Junta en una nota, este proceso se articulará en dos fases, la primera desde este lunes y hasta el próximo viernes, en la que desde profesionales sanitarios hasta personal de administración o de mantenimiento podrán proponer nombres de manera abierta y sin limitaciones a través de un enlace que les llegará a su correo electrónico corporativo, y cada trabajador sólo podrá hacer una única propuesta.
En la segunda fase, los trabajadores volverán a votar para elegir el nombre entre los de una lista cerrada conformada a partir de las propuestas recogidas en la primera fase, recibirán igualmente en sus correos una nueva invitación para participar y el resultado de esa votación determinará el nombre del nuevo hospital de Sevilla.
El Hospital Militar Vigil de Quiñones tomaba su nombre por el médico Rogelio Vigil de Quiñones, militar de un batallón español que defendió Baler, cerca de Manila, el último bastión colonial de España en Filipinas.
Sólo 33 militares del batallón, entre ellos Vigil de Quiñones, sobrevivieron y fueron conocidos como "los últimos de Filipinas".
Los familiares del médico ya han iniciado una campaña para defender que se mantenga el nombre de su abuelo en este hospital, como recogió en sus páginas Viva Sevilla.
La segunda fase del proceso se celebrará antes de que se concluya la rehabilitación completa del hospital, tras la que pasará, a partir de julio, a formar parte del sistema público sanitario como nuevo hospital general.
La Junta asumió la titularidad del antiguo Hospital Militar en 2003, una vez desafectado por el Ministerio de Defensa, anterior propietario, pero nunca llegó a ponerlo en funcionamiento, hasta que el 1 de febrero de 2021, en plena pandemia de la covid-19, lo reinauguró tras una rehabilitación de urgencia, que permitió abrirlo como hospital de emergencia Covid, con tres plantas de hospitalización con 141 camas, y 25 de UCI.
Cuando acaben los trabajos el nuevo hospital tendrá un total de 320 camas de hospitalización.
Tras su reapertura como hospital de emergencia Covid, la Junta ha continuado rehabilitando el centro , que en estos momentos tiene en funcionamiento varias plantas en las que no sólo se atiende ya a pacientes Covid.
Como hospital de emergencia Covid, ha atendido a más de 4.000 pacientes afectados de covid de la provincia de Sevilla y de Cádiz pero la progresiva apertura de nuevas plantas y servicios ha permitido ir ampliando la capacidad asistencial del centro hospitalario.
Este mes de marzo se inauguraron tres nuevas plantas, una de las cuales destinada a la Unidad de Alta Dependencia para Lesionados Medulares, y en estos momentos se ultima la rehabilitación del bloque quirúrgico, que contará con 10 quirófanos y una unidad de readaptación postquirúrgica (URPA) con 42 camas, cinco salas para endoscopias digestivas y dos más para endoscopias respiratorias.
El presupuesto para esta segunda fase de obras es de 39 millones de euros en obras y equipamiento y en la primera fase de puesta en funcionamiento se invirtieron otros 22 millones de euros.
El proyecto se completa con una planta de cirugía de corta estancia, una unidad de salud mental de agudos de referencia con un área independiente para adolescentes, un hospital de día, un equipo de resonancia magnética de última generación y una planta de simulación para especialización de profesionales de Andalucía occidental.