El Ayuntamiento de Sevilla ha informado este sábado de que está finalizando las obras de mejora de los accesos, adaptación a la accesibilidad universal y de cerramiento de seguridad del mercadillo de Alcosa.
Concretamente, esta actuación presupuestada con unos 425.000 euros abarca principalmente la mejora de los accesos de los vehículos en los que los comerciantes trasladan sus mercancías y que comparten con los clientes durante la jornada de ventas.
Para ello, se ha comenzado por el diseño de un nuevo acceso en la calle Capellán Leonardo del Castillo, donde se ha demolido el acerado para alojar un carril de entrada y otro de salida, con su correspondiente señalización y medidas de accesibilidad universal; al igual que en la calle Periodista José Antonio Garmendia, donde se ha mejorado el acceso a la plataforma a través de una excavación del terreno.
La actuación se ha completado con el asfaltado de unos 1.700 metros cuadrados que no se encontraban acondicionados y que son utilizados por los transportistas, así como reparaciones puntuales de 1.000 metros cuadrados de superficie del recinto, el reacondicionamiento de todos los taludes o la reordenación del tráfico, ganando un carril en cada sentido que facilite la llegada de los tenderos y el acceso a los aparcamientos de usuarios.
Del mismo modo, la obra acometida incluye elementos antivandálicos y la rotulación de todos los espacios definidos y de las plazas de aparcamiento.
"Esta iniciativa supone un nuevo impulso para visitar uno de los mercadillos más importantes de la ciudad mejorando las condiciones del recinto en el que los vendedores desarrollan su actividad. La propuesta se ha desarrollado en colaboración con los comerciantes y con los residentes del entorno con el objetivo de mejorar el uso y la seguridad del recinto", ha destacado el concejal de Economía y Comercio, Francisco Páez, en su visita junto al edil del distrito, Juan Tomás de Aragón.
Juan Tomás de Aragón ha señalado de su lado el nuevo cerramiento del perímetro de 60.000 metros cuadrados, que alcanza todo el recinto "con el objetivo de mejorar la seguridad en los días en los que hay mercadillo, limitar el acceso y las actividades en los días en los que no hay programación y responder a las demandas de los residentes del entorno que lo reclamaban".
