El arzobispo de Sevilla, monseñor José Ángel Saiz Meneses, ha lamentado la muerte del Papa Benedicto XVI, quien ha fallecido a los 95 años de edad este sábado 31 de diciembre, a las 9,34 horas, según ha informado la Oficina de Prensa del Vaticano y la Conferencia Episcopal Española.
Monseñor Saiz, en su cuenta personal de Twitter, consultada por Europa Press, ha destacado la labor del Papa emérito al frente de la Iglesia. "Benedicto XVI ha completado su peregrinación en la tierra. De reconocida formación académica, nos enseñó a poner a Cristo en el centro de la vida, a servir siempre y sin miedo a la verdad, a tender puentes de diálogo".
"A lo largo de su vida gozó de un carisma y un liderazgo que ejerció con un estilo propio y una sencillez que rompía los esquemas. Nos ha enseñado a ser cooperadores y defensores de la verdad. Gracias por su palabra y por su ejemplo de vida. Descanse en paz", concluye el mensaje del prelado hispalense en sus redes sociales.
En muchas de las iglesias de Sevilla, como en la parroquia de San Lorenzo y en la Basílica del Gran Poder, tras la confirmación del fallecimiento del Papa emérito, se ha oído el tañido fúnebre de las campanas en señal de duelo.
"Con pesar doy a conocer que el Papa emérito Benedicto XVI ha fallecido hoy, en el Monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano", ha confirmado a los periodistas acreditados el director de la oficina de prensa del Vaticano, Matteo Bruni.
Las condiciones de salud del Papa emérito se agravaron el pasado miércoles, tal y como anunció en la audiencia general Francisco, que dio cuenta de que estaba "muy enfermo".
Nadie en el entorno del Papa emérito imaginaba que sus condiciones de salud podrían empeorar de un día para otro. De hecho, el arzobispo Gänswein, que se ha convertido en su familia más cercana en estos nueve años y medio de retiro espiritual tras dar un paso al lado del liderazgo de la Iglesia, se encontraba en Alemania cuando el Papa Francisco reveló el pasado miércoles el deterioro progresivo de Benedicto XVI.
Benedicto XVI ha fallecido en su dormitorio en el monasterio Mater Ecclesiae, situado dentro de los muros del Vaticano, donde reside desde que renunció al pontificado en 2013. A pesar de la gravedad de su situación, en ningún momento fue traslado a ningún hospital aunque la atención médica que ha recibido en todo momento por su equipo médico era constante.