Una idea innovadora y un espíritu emprendedor con capacidad de adaptación. Así son las 400 scaleups y startups que participan hasta este jueves en el Al-Andalus Innovation Venture, un encuentro que permite conectar el emprendimiento con el capital, en concreto con 155 inversores y 120 corporaciones empresariales dispuestas a pasar de la idea al negocio pero, sobre todo, a crecer y seguir innovando.
Este ecosistema empresarial de innovación y tecnología se reúne por segundo año consecutivo en Sevilla y lo ha hecho con un éxito arrollador, con más de 1.500 participantes en su jornada inaugural y con un objetivo claro: conectar ideas y personas para conseguir nuevas oportunidades de negocio e inversión a través de la innovación. Y juegan un papel importante, no sólo las empresas expositoras, sino los 450 encuentros entre agentes de innovación, inversión y startups cerrados para estos dos días.
El mundo de las scaleups y las startups no sólo está vivo sino que además genera más emprendimiento. Con esa premisa ya tuvo el evento su previa en un vagón de Renfe, donde cinco scaleups, es decir, aquella startups cuyo negocio ha fructificado que desea redimensionar su modelo, mantuvieron encuentros con “notables inversores y grandes gestores de venture capital” en un espacio que no dejaba escapar ni la idea ni el dinero. Porque el feedback y el feeling funciona y un gran inversor puede apostar por un proyecto sólo con esos cinco minutos, cuentan desde RenfeLab, con los que se organizó la experiencia.
En la inauguración de Al-Andalus Innovation Venture, su fundador, Diego Vargas lo dejaba claro: se trata de conectar al emprendedor con inversores pero también “con el negocio”, porque no sólo quieren capital, “lo que quieren es tener negocio, que es la mejor manera de crecer”. Vargas invitaba a “aprovechar” los contactos porque “son un revulsivo para el ecosistema emprendedor y de innovación del país”, recordando que Andalucía está liderando la innovación en industrias estratégicas como la aeroespacial, la inteligencia artificial, gaming, el turismo y el agro.
Por su parte, el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, que alababa la elección de Cartuja para acoger el evento, porque “no hay en Europa un área tecnológica con casi 600 empresas que facturen 4.000 millones y tenga 29.000 trabajadores”, destacaba la apuesta de la ciudad por el emprendimiento, con la próxima creación de dos oficinas, la Open for Business, para captar inversiones, y Sevilla Acelera, para agilizar y acelerar los proyectos.
Mientras, el presidente de la Diputación de Sevilla, Javier Fernández, coincidía con Sanz en “la agenda y objetivos comunes”, como es facilitar las condiciones para las inversiones, alabando que “tanta gente joven” quiera poner la innovación al servicio de la sociedad. Desde Diputación buscan alcanzar la “cohesión social, territorial y digital”, aunque pedía, desde un punto de vista humanista, a los presentes que “sigáis inventando, que la tecnología está muy bien, pero nunca inventéis el abrazo, que sería el final de la raza humana”.
Por su parte, la viceconsejera de Universidad, Investigación e Innovación, Lorena Garrido, recalcaba la apuesta de la Junta por el emprendimiento innovador para “promover a gran escala la transferencia de conocimiento” y conectar a todos los agentes, los que generan y los que favorecen su desarrollo a través de la “innovación abierta”.
A la inauguración le seguían ponencias y charlas, ejemplos de éxito y fórmulas de negocio para unos emprendedores ávidos de paradigmas adaptables. La clave para competir es “ser los primeros en aportar soluciones de negocio innovadoras al cliente”, lo que permite crecer de forma estable, aseguraban desde Galgus, CoverManager o Z1, empresas andaluzas del ámbito digital y muy internacionalizadas. Elegir bien al inversor, contratar bien a las personas y trabajar la tolerancia al fracaso, destacaba Laura González-Estéfani, fundadora del fondo internacional TheVentureCity.
Del “efecto multiplicador” del emprendedor como referente hablaban Adrián García Aranyos (Endeavor Global) y David Troya (GlampingHub e Ikono), de los que se extraía una máxima que resume una parte fundamental de lo que es Al-Andalus Innovation Venture: ese emprendedor “incansable” que no se detiene en una primera empresa sino que lideran o cofundan “segundos o terceros negocios en búsqueda del éxito empresarial”.
