El Sindicato Médico en Sevilla ha denunciado las amenazas sufridas por una médica de un centro de salud de La Rinconada (Sevilla), donde un paciente se dirigió a ella con un hacha en las manos, después de haber lanzado varios petardos contra las puertas del centro sanitario.
Según ha explicado el vocal de la rama de Atención Primaria del Sindicato, David Maya, el pasado jueves, sobre las dos de la tarde, acudió un paciente de urgencias al centro de salud solicitando al médico de turno que le diera los partes de confirmación atrasados de la baja médica que había iniciado meses antes.
El médico de guardia en ese momento le informó al paciente de que, dado que llevaba desde enero sin recoger ningún parte, Inspección Médica había procedido al alta por incomparecencia, y, al oír esto, el paciente comenzó a gritar, a insultar y a amenazar a todos los médicos del centro de salud y, en particular, a su médica de familia, que no se encontraba en ese momento en el centro.
Horas más tarde el paciente pasó junto a la puerta del centro de salud y lanzó contra ella varios petardos, que alertaron tanto a administrativos como a pacientes que estaban allí presentes.
Debido a la gravedad de las amenazas realizadas por este paciente varios compañeros alertaron de la situación a su doctora, pese a lo cual ella se presentó al día siguiente a su trabajo, pero antes de bajar de su vehículo recibió la llamada de la directora de la unidad de gestión clínica advirtiéndole de que no debía bajar de su coche hasta que la Policía Local pudiera acompañarla hasta la consulta.
Tras presentarse en el lugar, la Policía, además, le advirtió de que no debía salir del centro de salud ni siquiera a desayunar sin que los avisara previamente a ellos, pero la doctora se vio desbordada y sufrió una crisis de ansiedad que la obligó a abandonar el centro de salud, "incapaz de entender el por qué de esta situación".
Pero, además, el paciente se presentó en la consulta de su doctora con un hacha, en actitud amenazante, por lo que el Sindicato Médico ha lamentado que pudiese tener acceso al edificio con este arma, reclamando, contra ello, una "respuesta contundente" por parte del SAS y de la Consejería de Salud.