La ópera del compositor alemán Richard Wagner vuelve, un año después, a subirse desde la próxima semana al escenario del Teatro de la Maestranza, que acogerá los próximos días 5, 9, 12 y 15 de diciembre la ópera Sigfredo, la segunda jornada del ciclo dramático de El anillo del Nibelungo después de La Valquiria, con Pedro Halffter y la compañía La Fura del Baus al frente, respectivamente, de la dirección musical y escénica.
Además, la ópera, una coproducción entre el Palau de Les Arts Reina Sofía de Valencia y Maggio Musicale Fiorentino, cuenta entre sus papeles principales con las voces del tenor Lance Ryan, en el papel de Siegfried; la soprano Catherine Foster, que interpretará a Brühnnhilde; el bajo-barítono Alan Held, que representa a El Caminante, y el también tenor Robert Brubaker, que se pone tras la piel de Mime.
La ópera cuenta la historia de Siegfried, un personaje que “jamás ha sentido miedo”, sentimiento que acaba descubriendo de la mano del amor y de Brühnnhilde, la primera mujer a la que conoce y de la que se enamora tras lograr despertarla con un beso en sus labios.
Lance Ryan, que repite en la piel de Sigfried, papel que ya tuvo ocasión de representar en Valencia, y Catherine Foster se estrenan con esta ópera en el Teatro de la Maestranza, en el que no habían tenido ocasión de actuar, según explicaron, una circunstancia que no comparten con Robert Brubaker y Alan Held, que se muestran encantados de regresar a Sevilla con ocasión de esta ópera.
En concreto, Held expresó su satisfacción por reencontrarse con otros cantantes wagnerianos, que conforman, según señaló, “una gran familia” de la que “le encanta formar parte”.
En opinión de Ryan, Sigfredo es “una de las óperas más interesantes de Wagner” por su carga de “fantasía”, algo que La Fura del Baus ha tratado de plasmar con una puesta en escena marcada por la colocación de espejos en el suelo que, según explicó Padrissa, tratan de reflejar “la confusión entre la realidad y la ficción” presente en la obra del maestro Wagner. En la misma línea se pronunció Halffter, que rechazó el “mito” de que esta ópera es “la más dura” de la tetralogía de Wagner que conforman, junto a ella, El oro del Rin, La Valquiria y El ocaso de los dioses.
