El colectivo ecologista WWF ha reaccionado a la posibilidad planteada por la Autoridad Portuaria de Sevilla de promover un proyecto de dragado de profundización del río Guadalquivir parcial durante 2015, de solo 0,85 metros --aplazando el resto del proyecto a años posteriores-- como modo de acelerar y hacer viable la iniciativa, manifestándose "totalmente en contra" y reiterando su petición al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente de que descarte definitivamente el dragado por sus "efectos negativos" sobre el estuario del Guadalquivir.
Respecto al proyecto, una reunión mantenida este lunes entre la Presidencia del Puerto y el sector de agricultores y regantes, según explicó a Europa Press el secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) en Andalucía, Agustín Rodríguez, concluyó en que el apoyo del segundo estaría supeditado a la ejecución del dragado en paralelo con otras dos iniciativas, las de protección de las márgenes del río --condición 'sine qua non' para acometer el dragado, según las conclusiones científicas incluidas en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA)-- y la de modernización del regadío del arroz, gestionada por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG).
En una nota, WWF reclama al Gobierno estatal y a la Junta de Andalucía que "impidan" esta acción, que considera un "claro fraude", y solicita que pongan en marcha las medidas imprescindibles para la recuperación del estuario, de acuerdo con el dictamen científico realizado en 2010.
Así, los conservacionistas han advertido de que, de acuerdo con la decisión del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente en 2011, dicho dictamen de la Comisión Científica es una condición de la DIA, por lo que "sin su cumplimiento y posterior evaluación previa no se puede ejecutar ningún tipo de dragado de profundización, ya sea parcial o total, hasta los ocho metros".
WWF ha recordado que, tres años después de esa decisión, las administraciones "no han avanzado en la puesta en marcha de la gestión integral del estuario ni han impulsado las medidas mínimas que pedían los científicos para la recuperación del río, como la restauración de los llanos mareales, el aumento de los caudales de agua dulce que llegan al estuario o la reducción de la contaminación procedente de la cuenca del Guadalquivir".
Además, "no se debe olvidar que actualmente la Comisión Europea tiene abierta una queja contra España por este proyecto, por lo que no debería comenzar ninguna actuación hasta que este procedimiento esté resuelto", subrayan.
Por otra parte, en la última reunión de su Comité de Patrimonio de la Humanidad, celebrada en junio, la Unesco volvió a exigir a España que se comprometa a descartar "definitivamente" el dragado de profundización del Guadalquivir, "un proyecto que supondría un impacto inasumible para los valores universales de Doñana".