Ybarra está ya tomando las primeras decisiones para continuar su trayectoria de casi 175 años con las brasas del incendio que ha clausurado su planta de mayonesa y salsas de Sevilla aún calientes. A muy corto plazo, y debido a que se ha calcinado una gran cantidad de producción que iba a salir ayer mismo, lunes, con destino a varios clientes, la empresa tiene que decidir qué firma externa puede asumir la fabricación de esos productos que el grupo andaluz Migasa (en el que está integrado Ybarra) no produce en ninguna otra de sus instalaciones.
La cuestión clave para la compañía es limitar qué parte de su conocimiento acumulado en la fabricación de salsas y mayonesas “sale” de Ybarra para permitir la continuidad en la producción. Y qué parte se puede retener. La empresa recibió ayer el apoyo de múltiples empresas agroalimentarias, incluidas competidoras. Entre ellas su antiguo socio y multinacional estadounidense del sector, Heinz, que podría ser uno de los candidatos bien situados para asumir temporalmente la fabricación de esos productos.
Fuentes de la compañía que preside desde hace un mes Antonio Gallego, uno de los tres propietarios de Migasa, precisan que la nueva fábrica que la empresa se ha comprometido a construir en la misma ubicación (en Dos Hermanas, Sevilla) podría estar lista en un año. Desde el ayuntamiento de Dos Hermanas se ofreció inicialmente, el fin de semana, negociar el traslado a otra ubicación dentro del término municipal. Pero la firma mantiene que tiene espacio en su parcela actual para esa reconstrucción.
En cuanto a la situación en la propia factoría, el lunes seguían activos ciertos rescoldos y sólo se mantienen operativas las oficinas y un laboratorio. Han visitado el lugar del siniestro la ministra de Empleo, Fátima Báñez, y la consejera de Agricultura, Carmen Ortiz, quienes estuvieron acompañados por Antonio Gallego, presidente de Ybarra desde hace sólo tres semanas y a su vez uno de los tres dueños de Migasa.
Ejemplo Campofrío
“Se ha perdido todo, la fábrica está calcinada casi en su integridad. Se ha perdido absolutamente todo”, precisa Francisco Villegas, director general. Los casi 200 trabajadores de la planta están ahora de vacaciones y la empresa estudiará las pérdidas y un nuevo plan de inversiones con el objetivo de que “todos” vuelvan a su puesto de trabajo.
Para ello, el Grupo Ybarra contará con el apoyo del Gobierno, la Junta y el Ayuntamiento de Dos Hermanas, que han enviado a los empleados un mensaje de “tranquilidad” y se han comprometido a garantizar el empleo de toda la plantilla. La ministra ha destacado que se trata de una empresa emblemática de la marca España y que “va a contar con la ayuda” del Gobierno.
“Vamos a sumar todas las administraciones para garantizar el empleo y la actividad. Será una nueva oportunidad para mantener una empresa emblemática del sector agroalimentario andaluz y español”, ha indicado Báñez, que ha puesto como ejemplo el precedente de Campofrío (Burgos). En este caso, los 774 empleados de la firma cárnica afectada por un incendio en noviembre de 2014 fueron a un ERE temporal en el que a la prestación individual se sumó una ayuda específica de 290 euros.
Peritos
Peritos y directivos de Marsh, la correduría de seguros que gestiona el reaseguro de Ybarra distribuido a su vez entre varias aseguradoras, estaban ayer trabajando sobre el terreno para estudiar las causas. La propia Ybarra tiene previsto contratar a una empresa de peritos (ha recibido varias ofertas de empresas de peritaje externas). Desde la empresa se ha señalado que la aseguradora está mostrando una actitud constructiva.
Los bomberos reiteraron ayer que el incendio, que se declaró el sábado a mediodía, tuvo seguramente su origen en el denominado “efecto lupa” que pudieron causar la altas temperaturas en la zona de carga y descarga, donde se apilaban palés de madera donde comenzó el fuego y que luego se extendió por el resto de la factoría.
Las viviendas desalojadas, con desperfectos
Por su parte, los vecinos de la urbanización La Hacienda, de Dos Hermanas que fueron desalojados el sábado como consecuencia del incendio registrado en la fábrica de aceite del Grupo Ybarra han empezado a volver a sus casas y a analizar los desperfectos que han encontrado fruto del fuego colindante, que no serían de una gravedad importante.
Uno de los vecinos, Francisco Javier Sánchez González, ha afirmado en declaraciones a Europa Press que aún quedan pequeñas llamas en lugares de muy difícil acceso para los servicios de emergencias, que están “a la espera de que llegue una serie de maquinaria” para ayudar a su labor.
La estructura de la urbanización no ha sufrido daños, pero el humo y las llamas que se generaban en la fábrica han provocado desperfectos tanto en el interior como en el exterior de las viviendas, tales como suciedad y árboles quemados, según asegura.
“Estamos desolados, desorientados desde el sábado que nos echaron y permitiéndonos sólo entrar para recoger lo más básico. No hemos tenido amparo ni por Ybarra ni el Ayuntamiento”, ha señalado.
Según Sánchez González, los vecinos fueron avisados de que debían salir de sus casas cuando las llamas superaban los 30 metros de altura. “Nos separan 15 metros de la fábrica; por un momento piensas que lo puedes perder todo y encima no hubo nadie que nos dijera que nos íbamos a poder realojar en algún lado, ni nos prestaron apoyo desde Ybarra ni desde el Ayuntamiento de Dos Hermanas”, ha indicado.
Así, cerca de las viviendas de la urbanización aún quedarían “hierros retorcidos y muchos rescoldos con llamas de tres o cuatro metros”. “Hubo explosiones durante el incendio, y menos mal que no llegaron a un depósito de gas natural que vemos nosotros desde nuestras casas”, ha señalado el vecino.
