Una operación conjunta de la Policía Nacional y el Servicio de Vigilancia Aduanera ha desarticulado una red de tráfico internacional de hachís con la detención de nueve personas y la intervención de 900 kilos de hachís y medio millón de cajetillas de tabaco de contrabando.
El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha destacado en una rueda de prensa que esta operación, que tuvo lugar el pasado fin de semana, es "la más importante" de las desarrolladas en lo que va de año por la Policía Nacional en Andalucía, tanto por el valor de lo incautado como por haber descubierto técnicas hasta ahora desconocidas en el tráfico de drogas.
El valor del hachís incautado ascendería a 1,5 millones de euros y el del tabaco de contrabando a 1,7 millones, importes a los que habría que sumar el precio de cinco vehículos de alta gama intervenidos así como de dos cabezas tractoras de camiones y cinco remolques.
Los nueve detenidos, que ya están en prisión, formaban parte de una red criminal que usaba una empresa de transportes de Écija (Sevilla) como "tapadera" para traficar con droga y tabaco de contrabando que transportaban desde Ceuta a varios países europeos.
Esta red despachaba camiones que transportaban mercancías legales y cuando consideraba que la matrículas de los camiones habían sido documentadas por Aduanas y por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado como transportistas legales, cambiaban el remolque convencional por otro con dispositivos para camuflar la droga.
Uno de estos remolques contaba con un sistema de seis cajones, unidos por cables de acero, que permitían transportar sobre el eje de camiones de hasta cinco ejes de ruedas unos 800 kilos de droga en cada uno de estos compartimentos, un sistema desconocido hasta ahora en este transporte ilícito.
La organización criminal, a la que también se le ha intervenido un revólver, realizó varios transportes sin carga a Ceuta, que sirvieron de señuelos para comprobar si estaba siendo vigilada.
Posteriormente, un camión con cargamento de droga fue interceptado en el puerto de Algeciras (Cádiz) por Vigilancia Aduanera, cuyos agentes detuvieron a su conductor y se incautaron de 922 kilos de hachís.
Dos personas que aguardaban la llegada del cargamento y que huyeron fueron detenidos en Marchena (Sevilla) tras una persecución policial.
Registros en Écija, Coria del Río y Alcalá de Guadaíra
Tras esta actuación, agentes policiales registraron naves de las localidades sevillanas de Écija, Coria del Río, Alcalá de Guadaíra y de Águilas (Murcia), donde se incautaron de 468.350 cajetillas de tabaco de contrabando, de cinco vehículos de gama alta, dos cabezas tractoras de camión y cinco remolques refrigerados, dos de ellos, modificados para esconder droga, un revólver con casi cien cartuchos y más de 50.000 euros.
Las pesquisas para desarticular esta red de narcotráfico permitieron alertar a las autoridades francesas de un cargamento de 1.750 kilos de hachís que fue descubierto en el país galo.
El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha destacado hoy a la prensa la importancia de esta operación, que ha considerado como "la más importante desarrollada en lo que va de año" por la Policía Nacional en Andalucía, tanto por el valor de lo incautado como por el grado de sofisticación de esta red criminal.
Ha recordado que en los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado se han incautado de 126,3 toneladas de hachís y de cuatro millones de cajetillas de tabaco de contrabando en Andalucía en lo que va de año.
"Una vez más, el trabajo profesional de la Policía Nacional y la cooperación entre diferentes dispositivos de la Agencia Tributaria han dado sus frutos en unan operación clave y muy importante", ha destacado.
Sanz ha concluido que "por más que inventen (los narcotraficantes) no lograrán evadir el control y la persecución del delito por parte de la Policía Nacional".