El concejal delegado de Hacienda y Administración Pública del Ayuntamiento de Sevilla, el socialista Joaquín Castillo, ha presentado este viernes la propuesta de ordenanzas fiscales para 2018, que plantea una congelación general de tasas y precios públicos, manteniendo las bonificaciones sociales, aunque sí modifica otros con la bajada del tres por ciento el impuesto de bienes inmuebles (IBI), tal como se acordó con CS; la actualización del relativo a los módulos de la Feria de Abril, para que se les repercuta el precio completo de instalación o la creación de uno nuevo para el cambio de uso de viviendas residenciales a turísticas, por unos 300 euros, las cuales tendrán que pasar además a pagar basura como local.
En rueda de prensa, junto al coordinador general de Hacienda, Javier Pérez Royo, Castillo ha señalado que la propuesta, "prudente, coherente, progresiva y en defensa de los servicios públicos", viene marcada por la previsión de caída de más de 13 millones de euros de los ingresos por el impuesto sobre el incremento de valores de terrenos de naturaleza urbana (Plusvalías), la reducción de la recaudación por el IBI tras finalizar el proceso de regularización de 2017 y el "previsible" descenso de las transferencias del Estado.
Estima en más de 20 millones la reducción de ingresos del próximo ejercicio, aunque subraya que "no repercutirá en ningún caso en los servicios ni en las inversiones públicas", manteniendo "firmes" los principios de no incrementar la presión fiscal sobre las familias, mantener programas y medidas sociales y progresivas y garantizar la inversión y el gasto público. Al hilo de ello, ve "imprescindible" que el Gobierno central revise las transferencias que realiza a los ayuntamientos y aporte una compensación especialmente por las pérdidas por el nuevo marco legislativo del impuesto de plusvalías.
En este marco, tras prever que el borrador del proyecto de presupuestos pueda estar a mediados de octubre, ha desgranado el borrador de las ordenanzas, que será remitido al Consejo Económico y Social de Sevilla (CESS) de forma inmediata.
Así, respecto a los pisos turísticos, pasarán a pagar la basura como si fuera un local, unos siete euros por cada plaza al trimestre al equipararse a un hostal o un hotel de tres estrellas, suponiendo el doble de lo que paga una vivienda familiar. A la vez, se crea una tasa urbanística por las licencias de ocupación para edificaciones existentes según el Reglamento de Disciplina Urbanística de Andalucía, cobrándose 300 euros por cambiar el uso de un inmueble residencial a turístico.
También en materia turística, el Real Alcázar aumentará dos euros la entrada general y aumenta el precio de sus tarifas de uso por el espacio, un montante que se destinará a inversiones en el patrimonio municipal.
En cuanto a las declaraciones responsables de Urbanismo, se congelan las relativas a viviendas de protección oficial, sin técnicos e inferiores a 12.000 euros si se tramitan por Internet. Las superiores a 12.000 y hasta 18.000 euros, en vez de los 39,5 euros que se cobraban hasta el momento, pasarán a suponer el 1,85 por ciento del valor de la obra si se tramita presencialmente o el 1,65 por ciento si se hace por Internet.
Además, se incluyen modificaciones en el bonobús solidario de Tussam, ya que en 2017 los usuarios tenían que haber estado parados de forma continuada al menos durante un año y ahora pueden contar con un máximo de 45 días trabajados durante esos doce meses que se contabilizan para la expedición de ese título de viaje.
Asimismo, subirá unos dos euros de media el impuesto sobre vehículos de tracción mecánica (IVTM), congelándose los de menor potencia y las motos, y la tasa de la grúa crece un cinco por ciento.
El aumento del 1,5 por ciento del Índice de Precios de Consumo (IPC) no se aplicará al impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras (ICIO), al impuestos de actividades económicas (IAE), a las tasas del Instituto Municipal de Deportes (IMD), por ocupación del espacio públicos --veladores o carrera oficial de Semana Santa, entre otros--, a las tarifas de Tussam o a la zona azul. En cambio, sí se aplica ese incremento del 1,5 por ciento a la tasa de basura para locales, a cementerio y a las placas de reservas de vados.
Respecto a la instalación de los módulos de la Feria de Abril, explica que hay un "profundo desajuste" entre el coste de instalación de las casetas en los casos en las que las monta el propio Ayuntamiento y lo que se repercute a los caseteros, por lo que ahora se pasará a cobrar íntegramente su coste, unos 160 euros más de lo que pagaban hasta ahora. Además, se unifica la tasa de basura para aquellos a los que sólo se les cede el suelo y a los que el Ayuntamiento también les monta el módulo, teniendo en cuenta en ambos casos los metros cuadrados.
"LO QUE DEJA DE INGRESAR NO SE COMPENSA"
Castillo ha visto necesarias estas modificaciones en las ordenanzas para evitar "el desplome de los recursos públicos", aunque supondrán unos 500.000 euros y no llegarán a compensar el descenso de los ingresos, algo sobre lo que también ha llamado la atención Pérez Royo, que se ha mostrado en desacuerdo "técnicamente con esta bajada del IBI", al entender que ya es de los más bajos. "Lo que se deja de ingresar no se compensa", agrega el catedrático de Derecho Constitucional.
El concejal socialista advierte, además, de que el gasto "va a aumentar" como consecuencia del incremento de alrededor del dos por ciento del salario de los empleados públicos, lo que supone un total de 5,3 millones más, y la jubilación anticipada propuesta por el Estado para los policías locales de 50 años, "lo que costará cuatro millones en Seguridad Social", y otros siete millones si se implantan las 35 horas.