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Sevilla

A prisión tres personas por el asesinato en 2016 de una anciana

Entre los detenidos por el crimen se encuentra una antigua cuidadora de la víctima, que murió por intoxicación química

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  • Guardia Civil -

Guardias civiles pertenecientes a la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil en Sevilla, en el marco de la operación 'Azano' desarrollada durante un año, han logrado identificar, localizar y detener a tres personas como presuntas autoras del asesinato en 2016 de una anciana de 90 años de edad en su casa de La Rinconada.

Según ha informado el Instituto Armado en un comunicado, los detenidos son J.M.P., varón de 42 años de edad y nacido en República Dominicana, y su pareja sentimental, J.M.A.B., de 32 años y nacionalidad nicaragüense, ambos vecinos de Mairena del Aljarafe, a los que se imputa un presunto delito de asesinato.

Asimismo, se ha identificado por su implicación en el crimen a una tercera persona que actualmente se encuentra en la cárcel por otros hechos. Los detenidos han sido puestos a disposición judicial, decretándose su ingreso en prisión, aunque la operación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.

Los hechos ocurrieron el 20 de noviembre de 2016, cuando los familiares de la víctima alertaron a la Guardia Civil de que un familiar suyo, en concreto una anciana, no abría la puerta.

INTOXICACIÓN QUÍMICA

Cuando los agentes lograron entrar en la vivienda, observaron el cuerpo sin vida de P.M.Z., natural de Sevilla y de 90 años de edad, la cual tenía quemaduras en la cara producidas por la acción de un pañuelo impregnado en un líquido corrosivo y cinta americana para tapar su boca.

Como consecuencia de estos hechos, se inició la operación 'Azano', asumida por el Equipo de Homicidios de la Guardia Civil de Sevilla, de forma que, desde un primer momento, los investigadores sospecharon "con fundamento" que el móvil de los implicados era el del robo.

Los medios empleados (intoxicación química), la violencia utilizada (amordazamiento con cinta americana) y el hecho de que la víctima era una persona de edad avanzada provocaron el fallecimiento de la víctima, hecho éste que forzó la huida de los asaltantes de la vivienda de manera precipitada, sin haber podido llevar a cabo el robo.

Debido a su avanzada edad, la víctima solía encontrarse acompañada prácticamente todo el tiempo, ya que tenía cuidadora. Así, en los últimos tiempos había contratado diferentes cuidadoras con variados turnos de trabajo según el caso y las circunstancias.

GUARDABA SUS AHORROS EN CASA

No obstante, todas conocían los hábitos de la anciana y cierta fijación por guardar sus pocos ahorros en casa. La fallecida, debido a sus problemas físicos de movilidad, solo salía de su domicilio para sacar del banco el dinero del cobro de la pensión, que luego guardaba en una caja de caudales en su vivienda.

Esta gestión la realizaba siempre acompañada de una cuidadora o un familiar.

Desde un primer momento, se sospechó que alguien de su círculo cercano pudiera estar implicado en los hechos debido al conocimiento que tenían los autores de las entradas y salidas de las cuidadoras, de modo que se realizó una "concienzuda" investigación al objeto de identificar a todas las asistentes que habían trabajado para la anciana en los últimos años, incluso aquellas que solo habían permanecido unos días en el domicilio y que finalmente no fueron contratadas y de las cuales no había quedado ningún tipo de constancia documental.

Sobre cada una de estas personas, se inició una investigación exhaustiva que permitió averiguar que la información utilizada por los autores del asesinato procedía de una antigua asistente que estuvo de pruebas con la fallecida hasta días antes del su fallecimiento.

LA CUIDADORA FACILITÓ LOS DATOS

Esta cuidadora facilitó a su pareja sentimental la información sobre dónde guardaba el dinero la fallecida y los posibles momentos en los que se encontraría sola la víctima, de forma que, junto a una tercera persona que se encuentra en prisión por otros hechos, organizaron el asalto a la vivienda.

Fruto de las investigaciones llevadas a cabo por el Equipo de Homicidios y de la "ejemplar" inspección técnica realizada por agentes del Laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil de Sevilla, se ha podido identificar y ubicar a cada uno de los autores en el lugar del asesinato, así como establecer su implicación en los hechos.

La "perseverancia" de la Guardia Civil y del Juzgado de Instrucción número 15 de Sevilla ha hecho posible que la operación haya finalizado con la detención de los presuntos autores del asesinato de la anciana.

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