Sevilla y Barcelona dirimen este miércoles, en la ida de los cuartos de la Copa del Rey, un duelo clásico en el siglo XXI, con siete finales con supremacía azulgrana -incluidas las Supercopas- entre sus precedentes y que medirá la necesidad de los andaluces, en su peor momento, con un Barça sin Messi, fuera de la lista de Valverde.
Se miden el campeón de las cuatro últimas ediciones, el Barça, y el subcampeón del torneo, un Sevilla que suele ser poderoso en las eliminatorias, como ha demostrado sobre todo en la Liga Europa, y siempre fuerte, combativo y ambicioso en su fortaleza del Sánchez Pizjuán; un sello en el que confían los nervionenses para plantear batalla y superar los negativos precedentes coperos ante los culés.
Aunque los sevillistas llevan catorce jornadas seguidas en zona 'Champions' en Liga -ahora cuartos después de la mala imagen en el Santiago Bernabéu (2-0)-, llegan a este primer asalto de un enfrentamiento de postín en pleno bache, tras tres derrotas seguidas (2 ligueras y una intrascendente en Copa merced al anterior 1-3 en San Mamés).
Aparte de la dificultad que entraña medirse con el Barcelona -no le gana desde octubre de 2015-, al equipo de Pablo Machín no le queda otra que dar el máximo para recuperar confianza y crédito en su peculiar cuesta de enero -sólo un triunfo en cinco partidos, el de Copa en Bilbao-.
El Sevilla busca reencontrarse en su habitual fortín de Nervión, sacar su competitividad, la casta, el orgullo y el 'Dicen que nunca se rinde'.. que propagan sus himnos para sobreponerse a su estado de ánimo, marcado ahora por cierto pesimismo en su afición, y a las lesiones -el exbarcelonista Munir y el francés Gnagnon se han unido a Nolito y el galo Gonalons-.
El objetivo es competir, seguir vivo para la vuelta y para intentar tomarse la revancha de sus dos dolorosas derrotas en las dos últimas finales de Copa contra el Barcelona: 2-0 en la de 2016, en la prórroga; y el humillante 5-0 en la de 2018, para lo que se prevé que Machín haga algunos cambios, pero manteniendo el bloque.
Uno de ellos podría ser la continuidad en Copa del joven meta Juan Soriano por el checo Tomás Vaclík, titular indiscutible y que cree que sería justo que siguiera su compañero, junto con el regreso del medio Roque Mesa, que no jugó contra el Real Madrid por sanción, en lugar de Pablo Sarabia o, más bien, el argentino Franco Vázquez.
Otras opciones para refrescar el equipo, desgastado físicamente porque empezó a competir en julio en Europa, pasarían por apostar por el holandés Quincy Promes como carrilero izquierdo en detrimento de Sergio Escudero, que no atraviesa su mejor momento, o por más músculo en el medio campo con el francocamerunés Ibrahim Amadou.
En frente estará el Barcelona, que, sin el lesionado Ousmane Dembélé, ni Messi, ni Busquets, a los que Valverde da descanso, y con la posibilidad de contar con su nuevo fichaje, el ghanés Kevin-Prince Boateng, buscará en el Sánchez Pizjuan dar otro paso más en la Copa del Rey, competición que maneja con mano de hierro.
El uruguayo Luis Suárez será el nueve, mientras que la tercera posición de ataque queda reservada para Coutinho. En la media, todo apunta a que Rakitic -también jugó media hora en el último choque liguero- y Arturo Vidal, reservado en LaLiga, serán los acompañantes de Sergio Busquets, de los pocos que no tienen sustituto en el equipo. En la meta estará el holandés Jasper Cillessen, habitual en la Copa, y en defensa Sergi Roberto y Jordi Alba -otro que no tiene sustituto- serán los carrileros, con Gerard Piqué acompañado por Clément Lenglet, quien descansó en el último partido.
Los precedentes son muy favorables para el Barça. En los trece enfrentamientos coperos ante el Sevilla, incluidas las finales ganadas por los azulgranas en 2016 y 2018, los catalanes han pasado en diez ocasiones.
- Alineaciones probables
Sevilla: Juan Soriano; Mercado, Kjaer, Sergi Gómez; Jesús Navas, Sarabia, Banega, Roque Mesa, Escudero o Promes; Ben Yedder, André Silva.
Barcelona: Cillessen; Sergi Roberto, Piqué, Lenglet, Alba; Busquets, Rakitic, Arturo Vidal; Denis Suárez, Luis Suárez, Coutinho.
Árbitro: Carlos del Cerro Grande (Comité Madrileño).
Estadio: Ramón Sánchez Pizjuán.
Hora: 21.30