Los ocho taxistas investigados por un delito electoral al boicotear un mitin de Susana Díaz en San Juan de Aznalfarache durante la campaña de las últimas elecciones autonómicas, se han acogido este martes a su derecho a no declarar ante la jueza y pedirán el archivo de la causa.
La titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Sevilla, Elvira Alberola, les ha concretado que "obstaculizaron e impidieron el mitin con actos violentos" como empujones e insultos, pero "no queda probado en absoluto", según ha explicado a los periodistas el abogado de los taxistas, Simón Fernández.
De acuerdo con el representante de los investigados, el mitin pudo haberse celebrado porque el aforo del Teatro Romero se completó, "por lo que no se impidió entrar a nadie", y uno de los motivos de la suspensión fue que el personal del recinto no encontró la llave de la puerta por donde debía entrar la entonces candidata del PSOE a la presidencia de la Junta de Andalucía.
De acuerdo con el letrado, esa explicación fue dada a la jueza hace varias semanas por "los dos organizadores del mitin", ambos pertenecientes a la agrupación provincial del PSOE de Sevilla.
Fernández también ha indicado que los taxistas investigados son finalmente ocho después de que primero hubiese más de veinte y luego se realizase una primera "selección" que redujo la cifra a catorce, a su vez rebajada a los ocho que han acudido hoy al juzgado de instrucción pero sin decir nada, ya que "no iban a añadir nada de lo que ya dijeron a la Policía".
El Ministerio Fiscal, además, ha pedido la ampliación del plazo de instrucción, aunque "no se ha acordado ninguna diligencia", ha añadido el defensor de los taxistas, quien ha anunciado que solicitará el archivo de la causa en cuanto vea "la mínima posibilidad".
