“El mensaje que ponemos hoy encima de la mesa es que queremos dejar atrás un episodio doloroso de nuestra historia desde la memoria y la dignidad”. Con estas palabras, el alcalde de la ciudad,
Juan Espadas, ha cerrado el acto de la
firma del convenio entre el Ayuntamiento, la Consejería de Cultura (con las competencias en memoria democrática)
y la Diputación de Sevilla para abordar los trabajos de
exhumación de la fosa de Pico Reja, en el cementerio de San Fernando, donde los investigadores cifran en
1.100 los restos de los represaliados por los franquistas. Estos mismos investigadores creen que entre los cuerpos que están en esta fosa podría encontrarse el de
Blas Infante, padre de la patria andaluza.
Casi un año después de la constitución del nuevo Gobierno de la Junta de Andalucía, de PP y Cs con el apoyo parlamentario de Vox (formación política que reniega de la memoria histórica), el convenio suscrito supone
garantizar que habrá recursos y apoyo de las administraciones firmantes durante los
tres años que está previsto que duren los trabajos en la fosa, y que ejecuta ya la empresa
Aranzadi. Con
1,1 millones de euros, el Ayuntamiento, la Junta y la Diputación buscan “
cerrar una profunda herida” y dar cumplimiento a un “compromiso” adquirido con las familias de los represaliados que están en Pico Reja. “
No podíamos seguir mirando de perfil”, ha subrayado Espadas, para el que “
una sociedad madura tiene que cerrar estos episodios y mirar al futuro”.
En la misma línea se ha manifestado la
consejera de Cultura, Patricia del Pozo, para la que “
por fin, se pueden empezar los trabajos para dar consuelo a las familias que quieren dar una sepultura digna” a sus seres queridos. Del Pozo ha reconocido que el convenio se ha hecho esperar pero ha subrayado también que la Junta “no se ha parado”. En este sentido, ha hecho alusión a la reciente publicación en el BOJA de la autorización para las exhumaciones de los restos, que la empresa Aranzadi tiene previsto comenzar en enero (como muy tarde, en la primera quincena del mes de febrero).
El
presidente de la Diputación de Sevilla,
Fernando Rodríguez Villalobos, ha resaltado el “
gran paso que damos como sociedad” al reconocer con este convenio “el derecho a conocer lo que pasó”.
En la reunión que hace semanas mantuvo Aranzadi con los familiares de Pico Reja, se anunció que ya han empezado los trabajos preparatorios en el terreno y que son más de
300 las muestras genéticas con las que cuenta, animando a otros familiares que tengan dudas sobre si sus seres queridos están o no en Pico Reja, a que dejen las suyas. Una vez terminen los trabajos, para 2022, el Ayuntamiento quiere dejar en Pico Reja algún símbolo o “hito” que sirva para honrar y recordar lo ocurrido en este lugar de memoria histórica.