El proyecto modificado para recuperar las Atarazanas de Sevilla ya está en el Colegio de Arquitectos para su visado correspondiente, según confirmaron ayer fuentes oficiales de La Caixa, entidad promotora de esta intervención.
Comienzan así a correr los plazos administrativos necesarios para que el proyecto, obra del arquitecto sevillano Guillermo Vázquez Consuegra, consiga la licencia de obra necesaria por parte de la Gerencia de Urbanismo, previo conocimiento e informe favorable de la Comisión de Patrimonio.
La Caixa confirmó a finales del mes de noviembre, y ante los temores expresados por la Asociación en Defensa del Patrimonio (Adepa) de nuevos retrasos en el proyecto, que “en breve” éste estaría en manos de la Comisión de Patrimonio para así poder empezar a dar forma a una rehabilitación largamente esperada por la ciudad. El primer paso a dar era contar con el visado preceptivo del Colegio de Arquitectos, donde ya está el proyecto y de donde saldrá con él “en unos días”, confirmaron fuentes de La Caixa consultadas.
La entidad confirmó también hace un mes que el proyecto básico modificado ya estaba “consensuado” con la Junta y que será la Consejería de Cultura, como propietaria del inmueble, “la que pida la licencia”. La Junta y La Caixa reafirmaron “su compromiso cien por cien con lo firmado en diciembre de 2017” con Adepa.
La Junta de Andalucía “tiene el compromiso de empezar lo antes posible” el proyecto. Un compromiso que ha expresado en primera persona la consejera Patricia del Pozo. En la misma línea se ha manifestado el alcalde de la ciudad, Juan Espadas, que ha remarcado su intención de acelerar el proyecto, dentro de los límites que marca la ley, una vez éste llegue a manos de la Gerencia de Urbanismo para la concesión de licencia.
El proyecto básico de las Atarazanas ya pasó por la Comisión de Patrimonio el pasado verano. En aquella reunión, los miembros del citado órgano administrativo valoraron favorablemente la documentación presentada, pero hicieron también una serie de consideraciones y recomendaciones que son las que han tenido que hacerse al diseño antes de ser remitido al Colegio de Arquitectos para su visado final. Una vez el Colegio haga su trabajo, el proyecto podrá volver a Patrimonio y de allí, a la Gerencia de Urbanismo.