La Fiscalía de Sevilla solicita doce años de cárcel para un hombre al que acusa de abusar "en reiteradas ocasiones" de su hija, que es menor de edad y se quedó embarazada cuando tenía trece años.

Según han informado fuentes judiciales a Efe, la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Sevilla tiene previsto juzgar la próxima semana a S.C.D., para quien el Ministerio Público pide, además de la condena a cárcel, ocho años de libertad vigilada, la pérdida de la patria potestad respecto de su hija y la inhabilitación especial para ejercer sus derechos paternos durante seis años.

El fiscal, que lo acusa de un delito continuado de abusos sexuales, también reclama que se le prohíba acercarse a menos de 400 metros o comunicarse con la víctima y que se lo inhabilite para cualquier profesión u oficio que implique contacto con menores de edad, en ambos casos durante un periodo de quince años.

En su escrito de calificación provisional, la Fiscalía relata que los hechos empezaron cuando la niña tenía doce años y se prolongaron hasta el 3 de octubre de 2019, día en el que fue trasladada a un centro médico porque padecía dolores abdominales y el pediatra comprobó que estaba embarazada de veintiuna semanas.

La víctima denunció entonces que había sido abusada por su padre, pero su madre negó los hechos y señaló que la hija era "muy fantasiosa", según refirió la Policía Nacional cuando informó de la detención en octubre del año pasado.

Más tarde, la niña se sometió a una interrupción voluntaria del embarazo y los especialistas, al estudiar el rastro genético del feto, confirmaron que el padre era el encausado.

El procesado, según el Ministerio Fiscal, solía abusar de su hija en el salón del domicilio familiar, en el barrio de Pino Montano, al aprovechar que la madre dormía la siesta con el otro hijo de la pareja, un bebé de un año.

La ahora adolescente, prosigue el escrito, presenta un nivel intelectual inferior a la media que provoca "un pobre desarrollo" de sus funciones psicológicas e incrementa su vulnerabilidad.

La Junta de Andalucía, que tiene la tutela de la víctima y está personada en la causa, ha pedido dieciocho años de cárcel para S.C.D., mientras que la familia de la menor solicita quince.