Antonio Ruiz Soler (Sevilla 1921, Madrid 1996), aquel chiquillo sevillano criado en el barrio de San Lorenzo, pasó a los anales de la historia del baile con el nombre de Antonio el bailarín, como de manera despectiva se refería a él su padre, según contó el propio artista en sus ‘Memorias de viva voz’.  

Este año, se cumple el centenario de su nacimiento y, en su tierra, se le rendirá esta misma semana un homenaje que se confía que sea el primero de unos cuantos más. El Teatro Maestranza acogerá este jueves y viernes, a las 19.00 horas, las dos funciones de estreno absoluto de la propuesta Centenario Antonio Ruiz Soler, que lleva la firma del Ballet Nacional de España, que dirige el también sevillano Rubén Olmo.

Las coreografías que Olmo ha seleccionado para el programa son Sonatas, Zapateado y Fantasía Galaica, tres estilos diferentes (escuela bolera, flamenco y folclore) que representan la “cumbre del talento” de Antonio el bailarín. Concretamente, Sonatas no había vuelto a los escenarios de forma completa desde su estreno en el Teatro de la Zarzuela en 1982. “Quería que estuviera en el programa del centenario porque esta coreografía de escuela bolera refleja muy bien la influencia de la técnica de la danza clásica en el estilo de Antonio”, explicó el director del Ballet Nacional en la presentación de este programa.

Durante más de dos horas y con 60 bailarines en escena, toda una proeza en plena pandemia, como subrayó el proio Rubén Olmo, el Ballet Nacional de España ofrece un espectáculo con el que reconocer el papel que jugó Antonio el bailarín. “Gran parte de la danza española se la debemos a él”, subrayó el director del Ballet.

El trabajo para llegar a este jueves y viernes en el Maestranza se remonta al mes de septiembre. Han sido muchas horas de estudio y ensayo. Desde la escenografía, donde el criterio general ha sido el de la reutilización de elementos originales o reproducción, hasta la preparación de piezas tan complicadas y redondas como Fantasía Galaica. “Ha sido terrorífico. Tiene hasta 52 rodillas en el suelo y todo el tiempo los bailarines con mascarilla”, relató Olmo.

El director del Maestranza, Javier Menéndez, no ocultó su satisfacción por acoger un “acontecimiento único” como lo es el estreno de Centenario Antonio Ruiz Soler. La delegada de Cultura en Sevilla, Susana Cayuelas, enfatizó que una propuesta así “ilumina la cultura de Sevilla”, al tiempo que Antonio Muñoz, delegado de Cultura del Ayuntamiento de Sevilla, reconoció que la ciudad “tiene una deuda” con Antonio el bailarín. Una deuda que esta misma semana empezará a saldarse con motivo del nacimiento de un genio.