El Puerto de Valencia y su futura ampliación está cada vez más cerca de ser una realidad. La Autoridad Portuaria de València (APV) ya publicó este jueves en su página web el proyecto constructivo del muelle de contenedores de la ampliación norte de la zona. Anteriormente, el Organismo Público Puertos del Estado (OPPE) ya aprobó la ampliación del puerto de la capital del Turia.
Tal y como informa la propia APV, la nueva terminal contará con 448 millones de euros de presupuesto público y con una inversión privada que llegará a los 1.021 millones de euros. Además, se espera que el plazo de la obra sea de unos 58 meses, algo que llevaría la ampliación hasta 2027.
Sobre el impacto medioambiental, la autoridad portuaria se defiende afirmando que “la nueva terminal será la más avanzada medioambientalmente del mundo”. En este punto, la APV destaca que es un “ejemplo de infraestructura que compatibiliza sostenibilidad y crecimiento”.
La falta de confianza que extraña al Partido Popular
Pese a las más que posibles cifras positivas de empleo (creación de hasta 44.000 puestos de trabajo) y de impacto en el territorio (llegará a representar el 2,27% de impacto económico de toda la Comunitat Valenciana), las discrepancias políticas en el mapa político valenciano sobre la ampliación del Puerto de Valencia han agitado la actualidad.
Y es que desde el Partido Popular de la Comunitat Valenciana (PPCV) no ven coherente la falta de apoyo que ellos sí ofrecen a este movimiento aprobado desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana liderado por la socialista Raquel Sánchez.
Desde Compromís se ha hablado abiertamente de “pelotazo”, “barbaridad” o “estafa a la ciudadanía”, mientras que desde Podemos se ha dicho que la ampliación del Puerto es un “ecocidio” y que surge de un “analfabetismo ecológico que ha pisado el acelerador”.
Mientras tanto, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, quiso ganar tiempo destacando que “todavía quedan muchos trámites”.
¿Es la ampliación del Puerto de Valencia una muestra más de los conflictos internos del gobierno del Botànic?