Así lo aclaró el alcalde accidental, José Antonio Ledesma y el concejal delegado de Infraestructuras, Obras y Servicios, Salvador Romero. Ledesma señaló que, “una vez que el inmueble volvió al Ayuntamiento, con la puesta en marcha de las instalaciones judiciales provisionales en El Toril, llegó el momento de buscarle una finalidad”.
El primer edil accidental comentó que “los técnicos municipales alertaron de las malas condiciones del edificio, por lo que decidimos que lo pertinente era derribarlo y utilizar el suelo para ampliar la Alameda. Así, estas Navidades nuestros vecinos, y en especial los más pequeños, podrán disponer de más espacio para disfrutar de este histórico lugar de esparcimiento”.
También Ledesma no quiso concretar qué tipo de equipamiento se ubicará en el espacio durante un futuro. “Barajamos varias ideas, pero en este momento tenemos otras prioridades que se concretarán en los proyectos ambiciosos y para todo el municipio, que se financiarán con fondos del Estado y de la Junta de Andalucía”, dijo Ledesma.