La empresa concesionaria del centro integral de la bicicleta, ubicado en el edificio de titularidad municipal del Paseo Catalina de Ribera junto a los Jardines de Murillo, ha iniciado ya las obras de rehabilitación y adecuación de este inmueble, que ha permanecido sin uso y deteriorado durante años. Estos trabajos tienen una duración prevista de seis meses.
La concesión de este inmueble, realizada en 2014 por un periodo de veinte años, incluye además de la explotación del edificio, la de dos parcelas colindantes al mismo, de 100 metros cuadrados cada una. A cambio, el adjudicatario, que resultó ser la UTE conformada por las empresas Pinapark Campamento, Deporte y Aventura S.L. y Bici Activa S.L.-Cyclo touristic 2000 S.L., debe hacer frente al pago de un canon anual de 4.400 euros al Ayuntamiento de Sevilla, con un periodo de carencia de dos años, que irá incrementándose en un 20 por ciento a partir del tercero y hasta el décimo, a partir del cual este cantidad aumentará otro diez por ciento hasta el final de la concesión.
El nuevo destino previsto para esta edificación responde a una propuesta formulada en su día por el Consorcio de Turismo y avalada por la Gerencia de Urbanismo, con el fin de fomentar el uso de la bicicleta con fines turísticos. En este sentido, el futuro establecimiento desarrollará muy diversas actividades, todas estrechamente relacionadas con la bicicleta y con este elemento como generador principal de todas ellas.
De este modo, entre las actividades previstas se incluyen las propias de un centro de estas características, y otras de carácter mucho más novedoso. Entre las primeras, se encuentran la recepción y atención a los usuarios, el alquiler de bicicletas o el asesoramiento e información de itinerarios ciclistas y recorridos turísticos en bici. Sobre esta última, los responsables del futuro centro han diseñado tres tipos de rutas para ofrecer: urbanas, de ciclo turismo y para mountain bikes.
Conjuntamente, este nuevo establecimiento acogerá otros usos, algunos de los cuales bastante novedosos, como la organización de cursos de mecánica o de educación vial para niños, exposiciones de temática diversa, como podrían ser la presentación de nuevos y vanguardistas modelos o la exhibición de bicicletas "vintage", y el alquiler de todo tipo de vehículos sostenibles más allá de las tradicionales bicicletas, como patinetes, bicis eléctricas o transportadores personales conocidos como "segway". El futuro Centro Integral de la Bicicleta también contará con servicios de autotaller para uso de los propios usuarios y, de guardería o custodia de bicicletas.
Algunas de estas actividades, como las exposiciones, podrán organizarse al aire libre, aprovechando el espacio de cien metros a cada lateral incluido en la concesión. Asimismo, sobre estas parcelas podrán ubicarse veladores, dado que el centro albergará también una cafetería, cuyo diseño estará totalmente homogeneizado con el destino del edificio y que se orientada hacia el consumo de productos nutricionales para el ciclista urbano.
Los usos que se pretenden dar a las zonas exteriores han sido informados favorablemente por la Comisión Provincial de Patriminio Histórico de la Junta de Andalucía, cuyo pronunciamiento resulta necesario al verse afectados por los mismos los Jardines de Murillo y el Paseo Catalina de Ribera, espacios declarados Bien de Interés Cultural, con la categoría de Jardín Histórico.
De momento, los trabajos de rehabilitación se han iniciado por el sótano del inmueble, que está previsto que se convierta en el lugar de almacenaje de las bicicletas, motivo por el que será diáfano. Por su parte, la superficie a la que se accede desde la calle será en la que se ubique la recepción y punto de asesoramiento sobre rutas e información, la zona de exposición de bicicletas, el punto de alquiler de bicis y, la cafetería. Finalmente, el espacio construido en la última planta construida se destinará a oficinas. El proyecto técnico de obras incluye también cuatro entradas de acceso al edificio, una por cada lateral.
