Año nuevo, vida nueva. El Recreativo Club Portuense se encamina en un ejercicio de cambios, muchos de ellos obligados por las circunstancias, en una nueva etapa que se abre en la entidad rojiblanca de par en par.
En el plano deportivo es momento de arrancar con un nuevo proyecto que se inicia con perspectivas de cambios y con las pretensiones de hallar consistencia y viabilidad en clave victoriosa.
Las victorias en fútbol, ya saben, enmascara todo, lo bueno y lo malo.
Igualar los registros dejados por el anterior inquilino del banquillo recreativista no va a ser fácil. Los números y resultados están ahí, los mismos que no terminaron de convencer en el pasado curso y que enturbió y dejó lastrar en una relación que se deterioró y que valió incluso para terminar afectando al equipo, tal y como se comprobó en una interminable Liga.
De todo ello se debiera aprender. Precisamente, éste ha encontrado con la contratación del nuevo entrenador, el jerezano Juanjo Durán, a un nuevo técnico que ya trabaja con unos 40 jugadores que son los que vienen entrenando en este arranque de la pretemporada y que supone todo un reto afrontar un campeonato con garantías plenas.
Nuevas maneras y nuevas técnicas que deberán amoldarse a las exigencias de una entidad que igualmente busca presidente al encontrarse en plenas elecciones a la presidencia.
Mientras tanto, el club anuncia sus nuevas contrataciones como la del mediapunta jerezano Pedro Herrera. Experiencia tiene de sobra al haber jugado en el Sanluqueño, Arcos, Jerez Industrial y Xerez DFC. O la del portero, procedente de Guadalcacín y que vendrá a luchar por un puesto clave.
A éste se les han unido la continuidad de jugadores que tuvieron un peso importante dentro del equipo en las últimas temporadas como son los casos de Borja Peinado, Rubén Darío, Abraham, Kevin, Josué o José Serrano a los que en breve se confirmarán más caras conocidas y de las que se van cerrando día tras día.
