Aitor Karanka espera “partido muy igualado” ante un Zaragoza “intenso”

El entrenador del Granada, Aitor Karanka, prevé un partido “muy igualado” este viernes en el Nuevo Los Cármenes entre su equipo y el Zaragoza, un conjunto “intenso”, en el que será clave “la intensidad y el ritmo” que puedan marcar los rojiblancos.

Karanka destacó este miércoles en rueda de prensa que su equipo dio “un paso adelante” ante la Ponferradina (0-0) y el Sporting de Gijón (5-0) antes de caer el pasado domingo en Tenerife (2-0), donde tuvo el hándicap de que había “jugadores que no estaban para jugar” o con los que no quiso “correr el riesgo” de alinearlos por si se lesionaban.

“Con todos los jugadores se hace un once inicial muy potente. El Granada cambia cuando estamos todos, cuando estamos todos juega como sabemos y queremos. No es que en casa juguemos diferente, es que cuando estamos todos jugamos diferente, se juega bien cuando estamos todos y cuando tenemos diez o doce días para entrenar”, comentó el técnico.

No obstante, dejó claro que él es el “responsable” de que “cuando falten jugadores, los que jueguen están lo mejor posible”.

Karanka también reconoció la “frustración que le entra al equipo” cuando está por debajo en el marcador y que es algo que tienen que “mejorar”.

“Cuando eso pasa tenemos que estar mejor, crear más ocasiones, remontar y no entrar en estado de frustración”, agregó el entrenador, quien no cree que la derrota en Tenerife deje señalados porque “los únicos que quedan señalados son los que no entrenan bien o no defienden bien el escudo”.

Sobre el Zaragoza, que visita este viernes el Nuevo Los Cármenes, comentó que es un equipo “intenso” y que “intenta jugar”, pero que “no tiene problemas en mandar balones largos”.

“Tenemos que saber lo que tenemos que hacer. Es un partido que seguramente sea muy igualado, esperemos estar la mayoría de jugadores para llevarlo a la intensidad y el ritmo que queremos”, añadió.

Karanka espera el viernes en casa “el ambiente del último partido ante el Sporting” y confía en que el equipo “empiece bien el partido”.

El técnico confía en que “la gente esté con el equipo” y en que “los jugadores no sientan presión” para que puedan “demostrar lo buenos que son y la calidad que tienen”.